Sinopsis

Viena, año 1938. Los nazis destrozan sinagogas y persiguen a los judíos. Uno de ellos, el médico Rudolph Adler, casado con Rachel, intenta sortear las dificultades de la situación. Finalmente, su hijo, Samuel, niño prodigio con el violín, logra viajar a Londres, en donde crece.
Arizona, año 2019. Selena Durán, trabajadora social, y Frank Angileri, intentan encontrar la familia de Anita Díaz, una niña ciega, hija de una inmigrante salvadoreña en los Estados Unidos.

Crítica

Novela de Isabel Allende que une a personajes con traumas derivados de infancias trágicas, en distintas épocas, que provocan cambio de países, desmembramiento familiar y adaptación a nuevas vidas.

El libro, como es habitual en estos tiempos, alterna épocas y puntos de vista narrativos, con el grueso de la obra en tercera persona y la primera utilizada por la niña Anita en una inmersión de fantasía escapista a través de la imaginación.
El libro no está mal escrito pero carece de consistencia, con dispersión de personajes y materias de conflicto ligadas por caracteres que caen en estereotipos, fácilmente asimilables por el gran público.




Se abre con el holocausto y se sigue con inmigración, el tráfico de mujeres y niños, la violencia social, la corrupción, la figura del niño como víctima de políticas destructivas o asuntos de coyuntura, tratados como hechos de noticiario sin penetración psicológica.

Incluso, como pegote romántico, la autora incluye también un forzado triángulo amoroso dentro de una novela sin impacto emocional de improbable vínculo de personajes.