Dirección: Mariano Laurenti.
Intérpretes: Gloria Guida, Fran Fullenwider, Lino Banfi, Vittorio Caprioli.
Con guión de Bruno Corbucci (“Mesalina, Mesalina”) y Alessandro Parenzo (“La Cosa Buffa”).
Sinopsis
Dos hermanas muy distintas, Giorgia (Gloria Guida) y Angela (Fran Funenwider), heredan en Bolonia una gran casa de su tía fallecida, una condesa, que terminan convirtiendo en una pensión. Allí se alojarán, gracias a los encantos de Giorgia, hombres de muy distinta ralea, desde un abogado a un político pasando por un agente antidroga con perro. Los rumores de un presunto burdel llegan al juez Damiani (Adolfo Celli), estricto mojigato que acude personalmente al lugar.
Crítica
Comedia sexy italiana con Gloria Guida como perdición de los hombres del lugar. Su atractivo es utilizado para conseguir clientes para su nueva pensión familiar. Su socia en el negocio es su oronda “hermana” Fran Fullwendir, a la que utilizan con gag recurrente de sonámbulo en distintas caracterizaciones de ópera: Cleopatra, Aída, la valkiria…
La película, de escasos desnudos, tiene el ágil ritmo del subgénero y una trama exploitation con el cachondeo esperado en modo enredo, empleando equívocos, “pilladas” infieles y ansias coitales varias, no faltando la sátira, aquí al censor obsesionado con el despelote ajeno, ni la caricatura en la fácil atracción/manipulación del hombre (sea poderoso o por empoderar) por las curvas de buen ver.
A destacar la música de Ubaldo Continiello, ahora parodiando la banda sonora de “La Pantera Rosa” de Henry Mancini y más tarde con una melodía muy similar a la de “Los Pajaritos” de María Jesús y su acordeón.
Fichas en AlohaCriticón