Dirección: Andy Serkis.
Intérpretes: Tom Hardy, Woody Harrelson, Michelle Williams, Naomie Harris.
Con guión de Kelly Marcel (“Cruella”).
Sinopsis
Eddie Brock (Tom Hardy), periodista que convive con el simbionte Venom en San Francisco, visita al asesino en serie Cletus Kasady (Woody Harrelson), a punto de ser ejecutado en la prisión de San Quintín.
Tras una discusión, Cletus muerde a Eddie generando un nuevo simbionte, Carnage.
Crítica
Secuela de “Venom”, cómic Marvel, con el mismo enfoque de cruce de géneros en formato serie B.
La historia es más floja que la primera y desaprovecha el encuentro entre psicópatas de distinta ralea, monstruos de hambre perpetua y antihéroes “a su pesar” en una mezcla en ambiente oscuro entre comedia de singular pareja con humor negro y una acción motivada por lucha de poder, una obsesión malsana, típicos traumas freudianos y tópica venganza.
Los gags recurrentes de buddy movie y crisis doméstica no funcionan en su gran mayoría, y la trama, con momentos intensos de pelea en el clímax con contexto de catedral, es demasiado sencilla.
A este personaje simbiótico no se le saca el jugo que se le podría sacar.
Resulta mucho mejor, con claves similares, disfrutar de las peripecias de “Deadpool”.
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