• Por Antonio Méndez

ocean colour scene on the leylineCrítica

“On The Leyline” es el octavo álbum en estudio de los Ocean Colour Scene, una prórroga de sus conocidas tendencias melódicas con armonías vocales y querencias por los sonidos de los 60 (y bandas posteriores con raíces también en la década citada), sean los los Beatles, las bandas mod de la época, el soul, la psicodelia, el R&B, el folk-rock o el Merseybeat.

Con el apoyo esencial de Paul Weller, quien aquí les compone la jamera “For Dancers Only”, se convirtieron en uno de los conjuntos puntales surgidos en el contexto brit-pop de los 90, y ahora siguen haciendo más o menos lo mismo. Música muy escuchable, con dosis de primor melódico pero con una escritura que no trasciende más allá de remedar con aciertos parciales sus modelos.




ocean colour scene fotoUna de las mejores canciones del disco es la pieza de apertura, “I Told You So”, luminoso y sencillo corte pop de descripción femenina (una hechizante moza que embruja con sus encantos) con armonías vocales puramente 60’s y una brillante melodía con una dinámica guitarrera que les emparenta tanto al power-pop de los Raspberries como a los Searchers o los primeros Beatles.

En “On The Leyline, Waiting” aceran las seis cuerdas con un riff y un tempo casi hard rock con ecos bravíos de pop guitarrero de unos Badfinger, “For Dancers Only” no deja dudas en cuanto a la autoría de un Paul Weller que siempre marca en sus ritmos su ascendencia y amor por el correoso soul norteño, y “Man In The Middle”, canción con exposición de angustia y dejadez, posee una progresión de acordes a lo Beatles de la época del disco blanco con el añadido de unas armonías de sabor californiano.



El álbum oferta diversos medios tiempos que tanto le acercan al Merseybeat como al soft-rock y folk rock melódico de America, o a los espléndidos Wings setenteros de Paul McCartney, como sucede en “Go to Sea”, o las acústicas “Mr. Brown”, pegadiza canción con base calypso, y “Two Lovers”, cálido folk rock de memoración infantil que tanto recuerda a Macca como a los Everly Brothers o Simon & Garfunkel.

Las influyentes armonías vocales de los Everly Brothers y las de sus discípulos (desde los Beatles a los Gerry & The Pacemakers, los Hollies, los Searchers, etc., y los incontables discípulos de estos últimos) también son perceptibles en “You’ll Never Find Me”.




ocean colour scene critica album“Don’t Girl Me” tiene esa crónica amorosa soft rock con armonías y tonos plañideros a lo America, acentuada por la armónica, al igual que “Loneliest Girl in the World”, que presenta armonías elevadas a lo Hollies en un pegadizo estribillo que alza el ritmo de la primera estrofa, o “These Days I’m Tired”, narración de libertad con magníficas armonías puramente Merseybeat y guitarras con trazos jazz y blues.

El disco termina con “Daylight”, corta historia de amanecer romántico que redunda su esencia acústica en la parte final del álbum.