Dirección: Maurizio Pradeux.
Intérpretes: Robert Hoffmann, Susan Scott, Simón Andreu, Anuska Borova.
Con guión de Maurizio Pradeaux (“Los Leopardos De Churchill”), Alfonso Balcázar (“La Casa De Las Muertas Vivientas”), Arpad DeRiso (“La Ragazzina”) y George Martin (“Escalofrío Diabólico”).
Sinopsis
Cuando está con sus padres, Kitty (Susan Scott) ve por un catalejo turístico un asesinato. Se trata de un hombre matando con una navaja a una bailarina llamada Marisa Martínez.
Más tarde se producen otras muertes que parecen ser obras del mismo autor.
En principio, el principal sospechoso es Alberto Morosini (Robert Hoffmann), la pareja de Kitty.
Crítica
Un año después del meritorio giallo “La Muerte Acaricia A Medianoche” (1972), la española Susan Scott (de nombre real Nieves Navarro) estrenó otro giallo hispano-italiano menos afortunado, este “Pasos De Danza Sobre El Filo De Una Navaja”.
El film, al igual que el referido, contó también con la presencia de Simón Andreu.
La película, acción policial sobre un asunto de asesino en serie y un “¿quién lo ha hecho?”, tiene un tratamiento de suspense adecuado con el habitual esteticismo del subgénero, aquí más con un tono sórdido, no faltando planos subjetivos, alucinaciones, traumas, escenas eróticas ni primeros planos con guantes de cuero en manos del asesino, aquí con navaja en ristre.
La trama, con ambiente de academia de baile (en plan “Suspiria”) es mediocre.
Fuerza la reunión de los caracteres vinculados sobre el hecho, va desperdigando pistas falsas y termina de manera previsible.
Solo hace falta advertir el descaro de las citadas pistas, la identidad de las víctimas y el tratamiento de la imagen sobre ciertos personajes.