Dirección: Michael Chaves.
Intérpretes: Taissa Farmiga, Storm Reid, Jonas Bloquet, Anna Popplewell.
Con guión de Akela Cooper (“Jupiter’s Legacy”), Ian Goldberg (“La Autopsia De Jane Doe”) y Richard Naing (“Eli”).
Sinopsis
1956.
Años después de haberse enfrentado al demonio Valak, la hermana Irene (Taissa Farmiga) viaja a Francia para investigar la extraña muerte de un sacerdote en la localidad de Tarascón. En el viaje le acompaña otra monja, la hermana Debra (Storm Reid), una joven con crisis de fe.
Crítica
Continuación de las historias cazademonios de “La Monja” en una película que es la novena entrega dentro del universo de posesión “Expediente Warren producido por James Wan.
El film vuelve a recurrir a la pelea entre el bien contra el mal con predecible conclusión, adornado el pesar de los protagonistas con traumas de niñez, crisis de fe, una singular asociación de pareja, acoso escolar y elaborando teorías disparatadas (aquí con Santa Lucía por medio) que motivan al diablo a personificarse estilo Marilyn Manson en “Antichrist Superstar” y a poseer a variados personajes para lograr sus objetivos.
No falta la reliquia poderosa dentro de una imaginería efectista y el susto “de repente” en terror paranormal (con ruidismo incluido en cambios bruscos de sonido y aceleración de imágenes) en una orientación de fantasía religiosa de nula originalidad y personajes irrelevantes.
Se conoce también como:
“La Monja 2”
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