Dirección: Mikael Hafstrom.
Intérpretes: Damson Idris, Anthony Mackie, Emily Beecham, Michael Kelly.
Con guión de Rob Yescombe y Rowan Athale (“Revolt”).
Sinopsis
Año 2036.
Después de que dos marines estadounidenses perdieran la vida por una decisión suya, el piloto de drones, teniente Michael Harp (Damson Idris), es enviado a otro destino, en donde se pone a las órdenes del capitán Leo, un androide con el que inicia una misión: detener a un grupo ucraniano que pretende unirse a Rusia y activar unas armas nucleares que permanecen desactivadas desde la Guerra Fría.
Crítica
Historia futurista de ciencia-ficción militar que une a un humano con un androide, lo que conlleva manidas disquisiciones morales sobre distintas emociones, actuaciones… en un entorno de conflicto, de violencia, de toma de decisiones y de consecuencias de las mismas.
La película, conocida también como “Zona De Riesgo” o “Zona De Combate”, aborda aspectos de deshumanización en una guerra dominada por la técnica más que por el hombre, en donde se sopesan los daños colaterales como cifras inevitables.
Es una cinta de acción pasable vinculada a una iniciación… de la guerra por control remoto, cómodamente sentado mirando pantallas, al campo de batalla rodeado de cadáveres y con disparos por doquier… con una previsible carga psicológica sobre el aprendizaje del error.
Los personajes no tienen mucho interés, los diálogos son pobres, y la acción tiene algún momento de intensidad dentro de una trama insípida de serie B, excesivamente larga y nada original.
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