Dirección: Santiago Segura.
Intérpretes: Santiago Segura, Leo Harlem, Florentino Fernández, Alan Miranda.
Con guión de Santiago Segura (“Padre No Hay Más Que Uno”) y Marta González de la Vega (“Sin Rodeos”).
Sinopsis
Ricardo (Santiago Segura), a punto de separarse de su mujer, Raquel (Eva Isanta), tiene que acompañar a su hijo, Marcos (Alan Miranda), y a otros niños en tren que viaja desde Madrid a un campamento en Asturias.
Cuando Clara (Paz Vega), madre de uno de los niños, se ve imposibilitada de acompañar a Ricardo, es el padre de Clara, Felipe (Leo Harlem), el que se une al viaje.
Antes de partir el tren, Felipe baja a tomar
Crítica
Si para sus anteriores comedias familiares, Santiago Segura se basó en una película argentina, en esta aventura cómica con niños se inspiró en un film francés para crear un enredo de carretera en la que hace sociedad humorística con Leo Harlem.
El film se introduce con gracia con personajes variopintos conectados en una situación de urgencia aliñada con agilidad y matices, falsa identidad, equívocos, caricatura, caracteres pintorescos y numerosos cameos derivados de la típica telexplotación de su protagonista.
Más tarde, el desarrollo alterna escenarios paralelos.
Los niños, por un lado, con travesuras y trabajo en equipo para derrotar a un revisor psicópata; y la pareja cómica Segura/Harlem (que tiene chispa a pesar de la rigidez del primero) en modo buddy movie con el añadido de “El Cejas” para acentuar un tono blanco-blando de screwball para todos los públicos.
La parte de los niños carece de creatividad y naturalidad, empleándose un básico humor físico como base en la pugna niños-“ogro”. El trío adulto tiene momentos simpáticos, en especial algún toque paródico, y variantes para agitar la trama contrarreloj dentro de un desarrollo con altibajos cómicos.
El escenario de Asturias está desaprovechado, y no se elude el toque impostado sentimentaloide. No obstante, se deja ver.
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