Dirección: David Fincher.
Intérpretes: Michael Fassbender, Tilda Swinton, Charles Parnell, Arliss Howard.
Con guión de Andrew Kevin Walker (“El Hombre Lobo”)
Sinopsis
Un asesino a sueldo (MIchael Fassbender) se encuentra en París vigilando un hotel para matar a un hombre, que llega a su habitación con una prostituta. El asesino prepara su fusil telescópico, escucha a los Smiths, apunta, dispara…
Crítica
David Fincher adaptó un cómic de los franceses Luc Jacamon y Alexis Matz Nolent en este film negro con protagonismo de Michael Fassbender, bien caracterizado como antihéroe frío, sistemático, disciplinado en sus rutinas de asesino a sueldo.
La película, estructurada en seis capítulos y un epílogo, tiene una trama simple, con la venganza como motivo y un particular método criminal. Ese método es la esencia del film.
Fassbender maneja filosofías/claves de actuación reiteradas… “no confíes en nadie”, “anticípate, no improvises”, “cíñete al plan”, “la empatía implica debilidad”… en un viaje criminal por distintas localizaciones narrado con estilo por Fincher en escenarios nocturnos neo noir, y con uso constante de la voz en off como monólogo interior del asesino protagonista, eje absoluto de una historia de interés, aunque sin demasiada profundidad, lineal, sin excesivos matices y con mínimo aporte de caracteres secundarios.
A destacar el uso de la música, tanto la banda sonora de Trent Reznor y Atticus Finch (miembros de Nine Inch Nails), sonidos atmosféricos de oscuridad ambient, como las recurrentes canciones de los Smiths.
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