Dirección: Anna Foerster.
Intérpretes: Allison Janney, Jurnee Smollett, Logan Marshall-Green, Greyston Holt.
Con guión de Maggie Cohn (“American Crime Story”) y Jack Stanley.
Sinopsis
Lou Adell (Allison Janney) vive en soledad junto a su perro en el pequeño pueblo de una isla.
Su vecina, que vive alquilada en una casa de su propiedad, es Hannah Dawson (Jurnee Smollett), una mujer cuya hija Vee (Ridley Bateman) es secuestrada en el momento que Lou está a punto de suicidarse.
Lou aparca el suicidio y se une a Hannah para intentar liberar a Vee.
Crítica
Mezcla de drama y acción con Allison Janney en modo Liam Neeson en su último tramo de carrera.
La película introduce al personaje de Janney con ambiente lluvioso.
Pasea el perro, sale de caza y se muestra malencarada con los paisanos del lugar.
Está claro que no es feliz.
Cosas del pasado.
No le gusta el presente y el futuro que lo disfruten o soporten los demás.
Por su parte, su vecina e inquilina, más joven, juega en contraste feliz al escondite con su hija.
Los dos personajes principales terminan unidos en una persecución contra el malo secuestrador de turno que disfruta con la música de Toto (“Hold The Line”, “Africa”), cuya identidad genera un primer giro muy poco creíble.
El grueso del film transcurre en un ambiente boscoso, con mal tiempo y las vicisitudes tópicas de tal escenario.
Una herida, una conversación ante el fuego, acción en cabaña…
Más tarde se revelan con otro giro (todavía menos creíble que el anterior, bastante ridículo) los motivos y traumas con rencillas familiares y traumas bélico-políticos…
En ese momento la trama, sin interés y con personajes planos, termina por desbarrar en un proceso efectista de redención y pelea sobre el agua en plan catarsis.
Muy floja.
Fichas en AlohaCriticón